El tratamiento para osteoartritis de rodilla debe ser aplicado por un especialista. Pues, se trata de una artritis que suele presentarse en la rodilla. Durante las primeras etapas existe la posibilidad de que un paciente no presente ninguno de los síntomas. A pesar de ello, durante las etapas posteriores es posible experimentar ciertos inconvenientes en términos de movilidad y es posible llegar a pensar en una cirugía. La osteoartritis de la rodilla afecta, el cartílago, el hueso y la membrana sinovial en la articulación de esta área del cuerpo.
¿Cuáles son las etapas de la osteoartritis de rodilla?
El cartílago es un tejido que cuenta con una superficie lisa, a través de la cual permite el movimiento de las articulaciones, además, actúa como una especie de cojín entre los huesos. En lo que respecta a la membrana sinovial, se caracteriza por ser suave, recubre las articulaciones, genera líquido sinovial para proporcionar lubricación y suministrar oxígeno y nutrientes al cartílago.
Cuando se degradan estas funciones, se pierde la protección de los huesos de la articulación de la rodilla. Lo cual puede repercutir en un daño óseo. En este sentido, la osteoartritis de la rodilla puede llegar a generar dolor y rigidez.
Etapas
Esta afección puede durar varios años en lograr desarrollarse. Los médicos frecuentemente usan etapas para detallar su nivel de progresión. Por lo general, se utiliza la clasificación Kellgren-Lawrence (KL) de osteoartritis. Sin embargo, existen otros sistemas para clasificar.
Etapa 1: Menor
Una radiografía puede ser un estudio que no alcanza a revelar ningún daño, pero las protuberancias que se presentan en el hueso, que son denominadas osteofitos, pueden ser una señal temprana de esta condición. Asimismo, se pueden notar otros cambios en la articulación que pueden incluir daños leves a nivel del cartílago y estrechamiento del espacio entre los huesos en la articulación.
Etapa 2: Leve
En lo que respecta a esta etapa, una radiografía puede llegar a mostrar un estrechamiento del espacio en la articulación y los espolones óseos. Probablemente, comience a aparecer dolor y rigidez en las articulaciones, sobre todo, luego de descansar por un tiempo.
El espacio donde están localizados los tejidos y los huesos, comenzará a endurecerse. Cuando se presenta este caso, el hueso tiende a ser más grueso y denso. Igualmente, se dará paso a una capa delgada de hueso debajo del cartílago en las respectivas articulaciones.
Es posible que exista algún daño menor, pero los huesos no alcanzan a rozar o frotar entre sí. Existe presencia de un líquido sinovial, lo que permite disminuir la fricción, ejerciendo apoyo en el movimiento de la rodilla.
Etapa 3: Moderada
Una radiografía en esta etapa podrá indicar:
- Imperfección en los extremos de los huesos.
- Cierto desarrollo de espolones óseos.
- Posibles daños en el cartílago y otros tejidos.
- Un estrechamiento visible del espacio articular.
A medida que la osteoartritis progresa, el cartílago continuará descomponiéndose. En el caso de los huesos, seguirán engrosando y generando crecimientos óseos hacia afuera.
Etapa 4: Grave
En esta etapa es posible observar en una radiografía algunos aspectos como:
- Un desarrollo significativo de espolones óseos.
- Daño visible en el cartílago, que posiblemente haya erosionado total o casi totalmente.
- Un estrechamiento complejo del área articular, que puede generar que los huesos se encuentren y se rocen.
Diagnóstico de la osteoartritis de rodilla
En caso de que una persona presente dolor de rodilla, el especialista de rodilla preguntará acerca de los síntomas, por ejemplo:
- Si la articulación ha cambiado de forma.
- ¿Cuánto tiempo tiende a durar el dolor en la mañana?
- ¿Cómo esto afecta la vida diaria?
- Si se toma algún medicamento.
- Si la rodilla parece inestable.
Es posible que se realicen pruebas especializadas como son:
- Resonancia magnética que permita la detección de señales tempranas que una radiografía podría no revelar.
- Radiografías para analizar el daño a la articulación.
- Análisis de sangre, con el fin de poder llegar a descartar otras patologías.
¿Qué tratamiento se aplica para la osteoartritis de rodilla?
Las alternativas de tratamiento para osteoartritis dependen de la etapa en la que se encuentre esta afección y de la rapidez con la que avance la misma.
Etapa 1
Los síntomas tienden a ser menores y el dolor se puede llegar a controlar, por lo general, con ciertos medicamentos que considere el médico. Además, se pueden establecer ejercicios determinados, con el fin de ayudar en el incremento de la movilidad y la fuerza.
Etapa 2
Dentro de los tratamientos a considerar en esta etapa, se encuentran algunos como:
- Usar plantillas en los zapatos para disminuir la tensión en la rodilla.
- Acudir a sesiones de fisioterapia, con el objetivo de desarrollar o mantener la fuerza y la flexibilidad.
- Tomar analgésicos.
- Hacer uso de una rodillera.
Etapa 3
Para esta etapa se pueden incluir tratamientos como:
- Tomar analgésicos conforme a las indicaciones del especialista en rodilla Campeche.
- Tomar analgésicos recetados, según las recomendaciones médicas.
- Recibir inyecciones de corticosteroides.
Etapa 4
En este punto, el cartílago se ha reducido o se ha desgastado completamente. Al respecto, el paciente puede continuar usando medicamentos analgésicos. Inclusive para mantener la movilidad, se recomienda el uso de un andador, bastón o soporte.
Asimismo, el especialista puede considerar la opción de la cirugía para conseguir el reemplazo o realineación de la articulación, según sea el caso.
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